En Lisboa tienes muchos monumentos y museos de gran interés junto a barriostradicionales por los que da gusto perderse. Algunas de las cosas imprescindibles que no debes dejar de hacer o visitar en Lisboa son:
* Monasterio de Los Jerónimos. Es uno de los monumentos más importantes de Lisboa y de todo Portugal. Se encuentra en el barrio de Belem y su valor arquitectónico e histórico lo convierten en visita imprescindible. El gótico, el manuelino y los primeros aires renacentistas se dan la mano en su espléndida fachada y en su interior hay que destacar el claustro y la iglesia, donde además se encuentran las tumbas de importantes personalidades históricas de Portugal.
* Castillo de San Jorge. Se encuentra en lo alto de la colina por la que transcurre el barrio de la Alfama. Construido en la época de los visigodos, remodelado posteriormente por los musulmanes y, siglos más tarde, por los cristianos, fue durante años residencia de los reyes de Portugal. Hay que visitar sus torres, murallas y jardines.
* Alfama y catedral. La Alfama es uno de los barrios más típicos de Lisboa, donde descubrir la esencia del fado. Recorre sus empinadas calles hasta llegar a la catedral, la Sè, con su austera e imponente fachada románica.
* Barrio de Belem. A orillas del Tajo y con dos de los monumentos más importantes y hermosos de Lisboa, la Torre de Belem, sobre las aguas y vigilando el estuario y el Monumento a los Descubrimientos, conjunto escultórico de más de 50 metros de altura que representa la proa de una calavera a punto de zarpar.
* Chiado. Tienes que perderte por las calles de esta pintoresca zona, la más glamurosa y bohemia de Lisboa, hasta llegar al Barrio Alto para descubrir, así, una ciudad que combina perfectamente tradición y vanguardia.
* Plaza del Comercio. Sin duda, la plaza más monumental de Lisboa, inmensa y abierta al Tajo mientras te invita a pasar al barrio de La Baixa, corazón comercial de la ciudad.
* Parque de las Naciones. Es una Lisboa diferente, moderna y llena de atractivos. La zona donde estuvo ubicada la Exposición Universal de 1998 es hoy un nuevo barrio con interesantes atracciones, áreas comerciales y agradables lugares para el paseo y el ocio. Contempla desde aquí los magníficos puentes que cruzan el Tajo.
* Los transportes. No hay ciudad europea que tenga medios de transporte tan peculiares como Lisboa. Su típico tranvía contribuye a darle ese aire nostálgico y encantador (no puedes dejar de subirte en uno). Si lo prefieres, puedes decidirte a subir a la zona alta en alguno de los típicos elevadores da Gloria o da Lavra o disfrutando de la experiencia de montar en el emblemático elevador de Santa Justa.
* Una noche de fado. Disfruta de una velada inolvidable en alguna de las casas de fado, con una deliciosa cena y una melodía que no te dejará indiferente.
* Museo dos Coches. En Lisboa tienes numerosos museos de absoluto interés pero éste resulta de los más llamativos. La colección de carruajes y calesas que contiene es asombrosa.